Este verano tuve la oportunidad de visitar "El Capricho De Gaudí" en Comillas (Cantabria). Y para contaros la magia que se escondía detrás y lo mucho que me gustó escribí un pequeño texto, un lugar que se convirtió en mi capricho y en el cual puedes soñar despierta y ....dormida. Lo que se trata es de soñar.
El Capricho
Amanecí con el capricho de verte. La sensación de no marcharme sin
contemplarte, de no conformarme con palabras ni imágenes.
Amanecí con ganas de soñarte.
El sol penetrando en la sala, la sonrisa en la cara de mí acompañante.
Los girasoles parecían moverse al son de la especial melodía que invadía el
lugar.
Ya solo quedaba imaginarme lo que se sentiría al pasar un día allí como
una Julieta esperando a su Romeo o una simple paseante por aquellos jardines.
Aquel capricho que surgió una vez de una mente brillante y la magia que
rodea al ahora llamado “Mi Capricho”.
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