jueves, 29 de mayo de 2014

Los Sueños, Sueños Son

Los sueños, aquellos que nos dicen que no podemos dejar ir. Aquellos que nos hacen imaginar lo imposible... y nunca mejor dicho.
Os está hablando  una persona con más pájaros en la cabeza... sueños... ilusiones y expectativas  pero bueno, la vida es así, a veces nos hace replantearnos las cosas.
Por mucho que uno pueda intentarlo, creer en ello y poner todo su empeño... cabe la posibilidad de que esos sueños no se cumplan.¿Pero acaso es lo mismo o justamente lo contrario? Yo creo que  es las dos cosas a la vez( Respuesta no muy lógica pero... lo veo así)
Y no creo estar siendo pesimista sino simplemente realista. A veces pongo tantas expectativas en algo o hacia algo que cuando no pasa lo que mi cabeza había imaginado (es decir, una historia completamente paralela ) me decepciono.

No creo que sea una visión pesimista sino realista, y creo, personalmente que debemos (me aplico el cuento) concentrarnos más en el día a día, en los pequeños detalles y marcarnos objetivos a corto plazo.Y cuando una oportunidad se presente, vivirla al máximo pero no hacerse muchas ilusiones ya que si no pasa nos hará pedazos pero por el contrario si sale bien nos hará aún mucha más ilusión.

También reconozco que imaginarse todo lo que podría ser es... especial, emocionante, pero creo que tenemos que ser soñadores realistas del día a día.


La vida es como una cámara. Concéntrate en lo que es importante, captura los buenos momentos, desarrolla a partir de los negativos y si las cosas no funcionan saca otra foto.










sábado, 17 de mayo de 2014

Gone

Ayer lo vi, sí, a aquel que tiempo atrás me había dedicado aquellos versos que recogían tantas emociones, tantos sentimientos, tanto amor...
Había pasado tiempo, es verdad, pero el paso del tiempo no significaba que lo hubiese olvidado.
Alguien, que de un día para otro, pasa de ser todo a nada, se convierte de pronto en un fantasma, un ser invisible. Desapareció, no dijo nada, pues ya lo había dicho con una mirada. Aunque una mirada a veces bastaba, nunca lo llegué a comprender.
Y él, que tanto admiraba mi sonrisa, aquella que solo aparecía cuando oía sus pasos decididos a metros de distancia... Esa sonrisa se esfumó junto con él.
Antes éramos nuestros propios capitanes, nosotros éramos los que decidíamos el rumbo que nuestras pequeña historia iba a tomar. Ahora me había quedado sola.
Pero había una fuerza, algo que yo no podía controlar, esta decidía por mí el rumbo de mis sueños.
Era él, se había convertido en el capitán se mis sueños, yo no opinaba, solo me dejaba guiar por el sonido de su grave voz, por sus ojos..... esos ojos, sus palabras llenas de sentimientos, que estoy segura que alguna vez sintió de verdad. Eso lo sé, estoy segura, porque aunque con un lápiz y un papel haga maravillas, cuando se trata de hablar de sentimientos no usa ficción.
No es justo y a la vez sí lo es. Porque alguien que ha significado tanto para ti, que es y será una fuente de inspiración inagotable no se merece desaparecer tan fácilmente de mi vida.
Duele, y mucho, que alguien que sabes que NUNCA volverá a ser lo que era sea el capitán de tus sueños... y de tu vida, la vida lo decidió así.
¿Conoces esa sensación? Esa en la que todo te recuerda a esa persona, desde el mar hasta una palabra, desde una calle a un número...
Aquella noche apareció, lo vi de lejos, ya no era el mismo. No sabría decirte que había cambiado, pero ese azul en sus ojos se había tornado gris oscuro, lejano, desilusionado, insensible.
Y es mismo sucedió ayer, lo vi ahí, estático mirándome. Estábamos a escasos 2 metros pero la vergüenza que sentía le impidió articular palabra. A diferencia de él, el capitán de mis sueños nunca callaba. 
Esta vez  no me tocaba hablar a mí yo ya había dicho todo. Tampoco quería explicaciones, no quería  nada, solo que no me abandonase en mis . Pero pese a mis deseos ocurrió y no volvió ni volverá, al menos es creo.
Pero el la vida nunca se puede estar seguro al cien por cien de nada.

domingo, 11 de mayo de 2014

¿Vidas Como Películas O Películas Como Vidas?

Una hora y media, dos y tres como mucho, es lo que tarda una película. Y en ese tiempo puede pasar de todo. Te lo esperes o no, te sorprenda o no, te aburra o no, te haga llorar o no, te haga reír o no ,etc,etc,etc.
 A veces una película  hace que nos enamoremos de los personajes, de sus historias, vida. Y creo que todos alguna vez hemos deseado que nos ocurra lo mismo que en ellas, un vida llena de acción, viajes a  otras épocas o a otros planetas, que nos ocurran cosas matemáticamente imposibles, porque en las películas pasa eso. Por ejemplo, dos personas que se  odian, enemigos desde siempre, que no se pueden ni ver acaban juntas o cuando ya crees que todo está pedido , no hay nada que hacer y cuando miras hacia el futuro ves... nada, sino al contrario, que vas a morir en algún lugar desconocido por la humanidad y justo entonces… aparece alguien y te salva. ¿Parece simple verdad? En las películas sí, pero la probabilidad de que suceda en la vida real es prácticamente nula…  ¿o no?
Es complicado, tampoco imposible pero improbable, aunque realmente me gustaría pensar que no por varias razones (como consuelo al menos)

  1.             Me gustaría que mi vida no se pudiese resumir en 2 horas. Sería triste pensar que llegado ya al final de mis días después de (espero) haber vivido muchos años todo .. mi esencia, las personas con las que he compartido, todo lo que he hecho se resumiese en eso.
  2.         Segunda cuestión. Con la “buena suerte” y lo pongo entre comillas porque es así; casi todas, y con ese casi me refiero a que puede que estemos hablando de que más de un 90% de las películas, tienen un final feliz, pero en mi caso, con ese imán para atraer a la buena suerte, podría pertenecer a ese 10%  lo que conllevaría tener ese final NO FELIZ,
  3.      En muchas historias, tanto de acción , como drama o romance hay  una gran dosis de ficción y cosas que nunca pasarán  o eso espero. Por ejemplo; no quiero ser abducida por un alien, enamorarme de un zombi… o cosas por el estilo.
  4.         Puedes cambiar tu destino,  en la vida, siempre hay lugar para el cambio, en una película por mucho que te sorprenda ya está grabado y antes o después lo verás pero será de la misma manera , no hay nada que pueda ser alterado, el final ya está ahí, solo está esperando a que tú lo veas.

Aun así, no me importaría enamorarme de uno de esos guapos actores, vivir una historia de ensueño o cualquiera de esas cosas

Una vez escrito esto he llegado a una conclusión, los conceptos son equivocados.


La vida, por sí sola es una película, tú eres el protagonista principal, y no necesitas que miles de personas la vean para que valga la pena.
"La vida es como una película. Si estás triste es un drama. Si estás asustado es suspense. Si estás furioso es acción. Cuando te miras al espejo es  de terror. Ahora que estás sonriendo es comedia."


Y tú, ¿qué título le pondrías a la película de tu vida?

domingo, 4 de mayo de 2014

¿Para qué escribir si.....?

Me preguntaron; ¿para qué escribir todo eso? ¿Porqué?
Reconozco que pienso mucho, además me había planteado y sabía perfectamente la razón por la que escribía, escribo y escribiré. 
Unos se aíslan, se alejan, pintan, lloran, ríen, leen, escuchan,observan etc. Cada uno tiene su propia terapia para bien asimilar distintos aspectos de la vida o para bien relajarse, conocerse un poco más a sí mismo o simplemente dejarse llevar.

Y realmente expresarse es complicado, aunque no pensé que lo fuese tanto. Te vuelves a replantear eso que ya tu cabeza tenia más que asimilado. 
Resulta curioso que sea tan fácil escribir sobre sentimientos y tan difícil explicarlo.
Así que aquí va la explicación, si acaso alguien puede entenderlo.

A falta de palabras, de acciones. Como consecuencia de distanciamientos, de experiencias yo necesito hacer algo para que esas palabras que no soy capaz de expresar de alguna manera queden plasmadas.
No es tan fácil como decir, escribo sobre mis sentimientos, porque obviamente si hay ficción, la experiencia pasa a un segundo plano. 
Si escribo sobre la realidad intento ser fiel dejándome guiar por la emoción del momento (puede sonar un poco cursi ) pero es la verdad. Si estoy triste no siento la necesidad de escribir sobre lo bonita que es la vida (que si lo es), pero no estoy de humor en ese momento. Igual que si quiero desaparecer, aislarme no escribo sobre una multitud, fiestas....

Cuando se mezclan los dos(imaginación + experiencia)  creo que es por la necesidad de crear una realidad paralela y eso que "sueño despierta" pase a ser la realidad de un personaje.
He contestado a la pregunta de sobre la razón por la que escribo, pero ahora falta para qué....
Por mi, para mi recuerdo, leerlo dentro de 5 años y reírme de aquellas situaciones vergonzosas, recordar como me sentía y tener un recuerdo, algo especial y aprender. Escribir acerca de cualquier cosa  te hace pensar en tu vida, en distintos aspectos..

Quería hacer unos pequeños incisos;
* Hay muchas  cosas que nadie, pero NADIE lee, ni creo que leerá nadie nunca.
* Por mucho que escriba sobre cosas que pueden ser muy idílicas, sé perfectamente como es la realidad. No confundo ni confundiré la ficción con la realidad. Entre mi imaginación y lo que escribo hay infinitos, lagunas, galaxias. 
* No hay nada malo en imaginar por unos instantes como sería algo, perderte en otro personaje, otra historia...


Quería añadir el poema V de Pablo Neruda. Por la simple razón de que habla acerca de la palabras y quienes las ocupan.

Poema V
Para que tú me oigas
mis palabras
se adelgazan a veces
como las huellas de las gaviotas en las playas.

Collar, cascabel ebrio
para tus manos suaves como las uvas.

Y las miro lejanas mis palabras.
Más que mías son tuyas.
Van trepando en mi viejo dolor como las yedras.

Ellas trepan así por las paredes húmedas.
Eres tú la culpable de este juego sangriento.
Ellas están huyendo de mi guarida oscura.
Todo lo llenas tú, todo lo llenas.

Antes que tú poblaron la soledad que ocupas,
y están acostumbradas más que tú a mi tristeza.

Ahora quiero que digan lo que quiero decirte
para que tú las oigas como quiero que me oigas.

El viento de la angustia aún las suele arrastrar.
Huracanes de sueños aún a veces las tumban.
Escuchas otras voces de mi voz dolorida.
Llanto de viejas bocas, sangre de viejas súplicas.
Ámame, compañera. No me abandones. Sígueme.
Sígueme, compañera, en esa ola de angustia.

Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras.
Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas.

Voy haciendo de todas un collar infinito
para tus blancas manos, suaves como las uvas.


"Del libro: 20 poemas de amor y una canción desesperada"
"Pablo Neruda"